Hoy quiero dar, particular; gracias por el 20 de enero del año pasado. Hay días que marcan la vida de las personas, hay días que no se olvidan, hay días mágicos (como el día que te conocí, no tengo porque mencionarlo, pero realmente pensé en magia y viniste a mi mente) días de colores, días soñadores, etc. Este día para mi, vino cargado de energía inexplicable de evolución.
Este día hizo detenerme a pensar mientras la vida sigue pasando, yo, admito, cometí muchos errores, muchos desfases nuevos en mi locura, que lo único que hicieron fueron lastimarme de la manera mas profunda que hasta ahora me han podido lastimar y dañar. (con esto no te libero del dolor, por tu parte causado).
Días previos mi alma gritaba que algo debía cambiar en mi vida, en mi mente, en mi percepción. El 20 de enero, comencé el día muy temprano, amaneciendo... ya despierta, tenía la sonrisa más grande en el rostro de la felicidad, tenía la burbuja más grande de incertidumbre en la cabeza, esa incertidumbre que desespera pero que gusta, me llevaba en mi alma y corazón el dolor y decepción mas grandes. Pero mi vida por sobretodo llevaba como siempre la mas grande FELICIDAD de empezar caminos nuevos, diferentes, con mi mayor compañía... mi soledad.
Así con los sentimientos entre mezclados, en el extremo de sentir tantas cosas en un solo momento, recibí ese 20 de enero. No hay mejor sentimiento (cursi) de estar sola y fuerte frente al mundo, así me sentía. Un día entero me envolvió en su energía de renovación pero por sobre todo maduración y entendí de evolución del alma.
Respiré profundamente ese día y muchos otros que le siguieron a este crecimiento de mi alma. En grandes avenidas, entre libros, entre fantasmas, en teatros, en salas de danza, en alturas acrobáticas, en golpes y emoción del poledance, en la playa, (como meses antes lo escribí en este mismo blog, la playa estaba esperándome) en música, en infinidad de momentos. Nunca olvide porque estaba ahí. FELIZ dejando desaparecer lo otro conscientemente, que siguió molestando más de lo esperado.
El 20 de enero fue mi iniciación a este nuevo nivel en mi vida, no me he establecido del todo ahí, creo que me falta bastante, pero el cambio es claro. Debo aceptar, extraño un par de actitudes mías del nivel anterior, actitudes algo descarriadas (sonrío).
Gracias! Hoy 20 de enero del nuevo año (2013) me siento bien, en una absoluta realización de mis sueños de vida, los cuales están para otra entrada. Tengo al mejor amigo de mi alma a mi lado, Watana is here, de diferente forma, pero siempre con su energía.
Gracias por el hermoso nivel que empecé hace un año. Sigo en ello sorprendida, FELIZ.
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